No des lástima, produce admiración
Deja de victimizarte, de decir que no tienes suficiente o que tus ingresos son bajos. Esas actitudes emanan una energía negativa de bajo nivel.
Si pasas la vida hablando de pobreza, eso es lo que atraerás. Quien no tiene dinero habla constantemente de él y se queja. Quien no tiene amor se lamenta de la falta de afecto y escucha canciones tristes. Así funcionan las cosas.
Además, debes abandonar el hábito de hacer de ti una víctima. Esa actitud nunca te permitirá mejorar.
Lo primero que debes cambiar es tu AUTOCONCEPTO. Puedes hacerlo leyendo el libro de Reingeniería Personal.
No eres pobre, simplemente tienes pocos recursos económicos. Actualmente, tienes limitaciones para generar más dinero y tus expectativas están por encima de tus ingresos.
El dinero llegará, lo conseguirás. Pero antes debes adquirir una nueva conciencia y tomar conciencia de tu situación actual.
Recuerda que tu situación financiera es simplemente un reflejo de tu estado energético, emocional y mental. Si en tu interior albergas pensamientos de abundancia, creas riqueza, ves oportunidades y buscas el progreso, pronto se verá reflejado en tus finanzas.
Lo segundo que debes mejorar es tu valoración personal. No te conformes con poco, busca grandes logros. Aprende a administrar tus recursos y establece bien tus prioridades.
Lo tercero que debes mejorar es tu lenguaje. Cambia tus palabras. Hay personas que pasan el día hablando de enfermedades o de que no tienen lo suficiente. Cuando te pregunten cómo estás, no respondas de forma desganada: “Aquí, más o menos” o “Sobreviviendo”, o peor aún, “Al borde de la indigencia”. En su lugar, responde con una actitud positiva: “¡Al millón!” “Progresando a toda velocidad” “Excelente” “Muy bien”. Tus palabras generan una nueva vibración.
Gracias por leerme, DrRoch.