Entender estas leyes de la vida temporal es clave para obtener resultados evidentes en la vida empresarial y económica. Revisa cada ley y reflexiona sobre cómo se aplica en tu vida.

1. La ley de la creación

Todo se crea dos veces: primero en tu mente y luego en la realidad. Lo que imaginamos y visualizamos primero, se manifiesta en el mundo físico. Creamos nuestra vida y podemos alinearnos con pensamientos automáticos de la sociedad. Evita la información irrelevante: conversaciones de chismes, ver televisión o pasar demasiadas horas en redes sociales. Invierte el 10% de tus ingresos en prepararte para administrar tu mente: libros, cursos, talleres, conferencias, etc.

2. La vida es incertidumbre

La vida está llena de incertidumbre, y aunque nos digan que hay certezas, debemos aceptar que estamos viviendo en la incertidumbre. A veces, se nos dice que nuestros proyectos no prosperarán o que nuestros trabajos no sirven. Sin embargo, actuar nos ayuda a mejorar, incluso si no sabemos cuándo sucederá.

3. La ley de la causa y efecto

Todo lo que sucede en esta vida es un efecto generado por una causa. Por ejemplo, si entendemos que la salud es un efecto, debemos preguntarnos cuál es la causa. Lo mismo aplica para el dinero: ¿cuál es la causa de tener dinero? Si somos conscientes de que todo lo que hacemos tiene un efecto, seremos más cuidadosos en nuestras acciones diarias.

4. La ley de la acción

Nada se crea sin acción. Las acciones comienzan con decisiones, y cuando les añadimos pasión, nos llevan a resultados. Sin acción, nada de lo que imaginamos en nuestra mente se materializa en el mundo físico.

5. La ley del apego

La pobreza económica no es solo falta de dinero. La clave está en aumentar tus ingresos, no solo en reducir gastos. Para hacerlo, sé más valioso en el mercado, ofrece algo que pocos tengan y destaca en tu campo. Aporta valor y sé útil, ya que los ingresos están relacionados con la utilidad.

6. La vida avanza escalón por escalón

La vida no avanza de manera lineal, sino por etapas. Puedes subir o bajar rápidamente, pero también puedes entregar más valor cada año. Hay problemas buenos y malos. Por ejemplo, problemas buenos de dinero serían que tus inversiones rindan un 30% en lugar del 45% del año pasado. Malos problemas de dinero serían tener deudas que no puedes pagar. En términos de salud, un problema bueno sería bajar de peso, pero menos de lo esperado; mientras que uno malo sería engordar sin darte cuenta.

7. El desarrollo personal empieza por el cuerpo

Cuida tu salud física y económica. La energía física incluye salud y dinero: sustento, vivienda, comida y ropa. Primero cuida de tu salud y dinero, luego vendrán el amor, la plenitud y el propósito. No hay propósito sin salud ni dinero. La pobreza y la enfermedad nos hacen ignorantes y, sobre todo, egoístas.

Es difícil ser generoso cuando tienes dolor o dificultades económicas. Cuida tu descanso, alimentación y ejercicio, así como tu presupuesto, ingresos e inversiones. Conviértete en tu propio secretario de educación. Si cuidas estos aspectos, mejorar es solo cuestión de tiempo.

Gracias por leerme.
Dr. Roch.