La riqueza, la fama, el poder… ¡No son el camino!

Ni la riqueza, ni la fama, ni el poder son el camino de la realización y de la felicidad.

Desde que apareció el homo-sapiens, tenemos claro como humanidad que el sentido de la historia es la búsqueda del bien común.

Me pregunto ¿en qué momento empezamos a interesarnos por el beneficio individual en vez del colectivo?
¿En qué momento aceptamos el discurso de la riqueza como el camino a seguir?
¿En qué momento el miedo comenzó a dictar nuestro comportamiento?

¡Ah! Estoy convencido y consciente de qué el mundo visible tiene su origen en el interior en el mundo invisible.

De qué el mundo exterior es sólo un reflejo de la manera en que pensamos, sentimos, y dirigimos nuestra atención.

En el mundo exterior es sólo un reflejo de la manera como nos amamos a nosotros mismos como amamos a los demás.

Hemos vivido durante muchos años y de un modelo obsoleto. Muchas de las cosas que antes funcionaban y ahora descomponen la realidad..

La realidad moderna y el mundo moderno ya cambiaron, pero la forma en que lo vemos también cambio.

Hoy en día ya nos vemos lo mismo que el de al lado a pesar de qué ambos estemos presentes en el mismo acontecimiento.

La realidad moderna es que uno ve lo que quiere ver. O mejor dicho ves lo que te enseñaron a ver. O peor aún ves lo que puedes ver desde el lugar donde estás colocado, pero nunca tienes la visión completa de 360° tú solo. Para lograrlo sería necesario que tomar en cuenta la visión de la realidad de por lo menos 12 personas.

Desde esta mirada interior me gustaría iniciar una conversación contigo sobre la realidad moderna, sobre lo que está pasando en tu mundo, sobre lo que del mundo estás queriendo ver.

Es importante que te voltees a ver a ti mismo, que te mires la vida y que descubras las imágenes que te han acompañado, los momentos que te han marcado, los acontecimientos que te han transformado en lo que hoy eres.

Cuando eras niño pasaron muchas cosas, y me sucedieron muchos hechos de los que no te diste cuenta, cuando eras niño tú veías cosas que hoy como adulto ya no vez.

Lo importante del caso es que aprendas a rescatar esos pequeños fragmentos de vida vivida, y el anhelo de tu ser sabio interior que siempre ha creído en ti y ha querido construir un mundo mejor del que hoy tienes.

Confío en que este artículo en mis palabras que te hayan sido de utilidad.

Gracias por leerme.
– Dr. Roch

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